viernes, 26 de noviembre de 2010

Pasan los días

Instalado el invierno en el ánimo y necesitado de sol, el recurso al cine de acción es una gran ayuda para ocupar las horas con la tensión vibrante desatada en un tren imparable. De forma involuntaria estoy muy cerca de la prosa poética.
Otro remedio consolador y reconfortante es la investigación de manuscritos genealógicos. Aunque no alcanzo a vislumbrar el destino de este trabajo, el mero hecho de la transcripción de las huellas escritas de otras vidas me entretiene de forma agradable.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Llega el invierno

Esta mañana he sentido frío, aderezado con viento y llovizna, en el patio del trabajo cuando entraba y salía de la cafetería en los momentos acostumbrados. Es una pequeña novedad esta desaparición temporal del sol.
Las visitas a las enfermas es otro de los cambios en la rutina de estas semanas a la vez que una llamada de atención sobre las cuestiones fundamentales de la vida.
La comida en el restaurante "Abadía d'Espí" resultó excelente en todos los platos, y la representación de "El búho y la gata" me gustó bastante por el retrato de los protagonistas y el buen hacer de los actores. Incluso me ha parecido mejor que "El condenado por desconfiado".

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Emociones

El contraste que experimento entre, por un lado, los ojos llenos de lágrimas por la noticia de una desgracia lejana, un resultado positivo en algunos deportes o una película que remueve y desborda las emociones, y, por otro, la aparente impasibilidad ante las grandes tragedias que me afectan en lo más profundo de mi ser, no deja de sorprenderme y no acierto a comprenderlo.